Relente entre tramos del espacio, como cánticos físicos en un coro estelar, lapsos y latencias en frecuencias sobre halos, colocados sobre la esencia que no alberga el azar.
Enlazar la tendencia afín entre espacio y tiempo, más allá de la asidua forma de un solo universo, con colapsos aptos para la percepción que los ha provocado, en el recibir de lo que se alejó sin quedar limitado.
En la singularidad en la que habita el presente, en la mente en la que la que la fe transciende, en el conexión cuántica persistente, en el danzar cósmico de la existencia vigente.
Relente entre tramos del espacio, una melodía que unifica lo finito y lo eterno, una sinfonía que une la trascendencia del tiempo, una canción que a sí misma se canta tras su profundo misterio.